El embarazo, una oportunidad de crecimiento

Muchas culturas representan el embarazo como un laberinto al cual se entra, y del cual se sale, por un mismo camino. Este sendero va cambiando de dirección constantemente, desconcertándonos y sin que podamos saber de antemano cuál será el rumbo que tomará.

El embarazo es el comienzo de un viaje que probablemente modificará profundamente la vida de cada mujer. Es momento de desafíos personales, familiares y sociales y, como todo desafío, podemos elegir nuestra forma de transitarlo.

Una vez que nos encontramos frente al umbral, podemos decidir atravesarlo y recorrer el camino hacia nuestro interior. Probablemente nos encontremos con miedos, con deseos, con ilusiones, con cambios de rumbo, con mandatos, con emociones contradictorias, con dificultades, con alegrías, con descubrimientos, con compañías y con soledades.

Será nuestra labor adentrarnos en ese laberinto y volver a salir de él con lo que hayamos podido aprender, con la madre que querramos ser, con las herramientas que hayamos encontrado para enfrentarnos a nuestros miedos.

Un camino que nos llevará al encuentro con nuestro hij@ y a la entrada de un nuevo laberinto que recorrer.